Siete mamás de un pueblo de Salamanca decidieron a finales del año pasado enseñar sus cuerpos serranos, y nunca mejor dicho, en un calendario para financiar un centro de ocio infantil. La primera edición de 2.000 ejemplares les fue bien y encargaron más. La imprenta les engañó en el precio y en los plazos y ahora tienen calendarios para toda la provincia y deben 9.000 euros.
Una historia verdadera, como la peli de Linch, y patética como la vida misma. La España profunda en rosa.
El calendario no tiene desperdicio. Parece sacado de una revista erótica de los setenta: Lib o Yes, o alguna de esas.
Si Buenafuente lo viera, las llamaba a su programa y el mes que viene se subastaban sus fotos en e-bay a mayor precio que la de Carla Bruni en Christies.
Quien quiera verlo puede enlazar desde esta noticia de 20 minutos.
Hoy es 14 de abril. Muchos aniversarios particulares y uno universal: se proclamó la II República Española.
Libertad y serenidad.
